La forma de este dispositivo era algo similar a un teléfono móvil, pero mucho más avanzado. Estaba infundido con energía espiritual.
—Maestro de la secta, ¡malas noticias! ¡Ha ocurrido algo grande! ¡Hace un momento, se rompieron cien fichas de vida! ¡Además, tanto el Señor Lei como el Anciano Zheng han caído!
Se escuchó una voz aterrada desde el otro extremo de la línea. Aunque la voz era muy suave, era fácil para los poderosos cultivadores presentes en esta reunión escuchar la conversación.
Sus expresiones cambiaron ligeramente, ¡mientras aspiraban una bocanada de aire frío!
La Sala de Batalla de Sangre era una de las fuerzas más fuertes de la Alianza de Sangre. ¿Cómo podría suceder algo así?
En este momento, la cara de Jian Ruxue se volvió ceniza. El había enviado a ese cien hombres para buscar a Ye Shitian, por lo que sus muertes definitivamente tenían algo que ver con este último.
