"Los labios de Li Xuanjun se curvaron en una sonrisa burlona mientras miraba a Ye Chen, quien jadeaba por aire.
Esa era la abrumadora diferencia de fuerza entre ellos.
—Este bastardo había tratado realmente de escapar de sus manos. Qué ridículo —pensó Li Xuanjun—. Hoy, quiero que Ye Chen muera.
Después de todo, esto era lo que le habían encomendado al salir de las Montañas Kunlun esta vez.
—Mocoso, prepárate para tu último aliento —amenazó Li Xuanjun.
La intención de matar barría como una gran ola, y el corazón de Ye Chen se hundió.
Era como si una mano invisible estuviera estrangulando su garganta, asfixiándolo...
Viendo la espada de Li Xuanjun aparecer frente a Ye Chen, en su momento de crisis, ¡salió una luz rojo sangre!
Para sorpresa de Ye Chen, ¡fue la Espada Mata Dragones la que salió esta vez!
¡Su espada espiritual estaba protegiéndolo!
¡Esto solo se había escuchado en leyendas!
