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—Ye Chen, en efecto eres bastante fuerte, pero lamentablemente, ¡aquí termina todo!
El Señor Demonio Sediento de Sangre levantó su mano y una impresión de palma de color rojo sangre apareció en el cielo, mezclada con el aura de destrucción.
—¡Palma del Cielo Sangriento!
El Señor Demonio Sediento de Sangre rugió furiosamente, y luego la palma golpeó.
En el momento en que aterrizó en el suelo, Ye Chen levantó los brazos. Las venas de sus brazos se hincharon mientras usaba su cuerpo para resistir el golpe de la palma.
—¡Argh!
La expresión de Ye Chen era feroz. En ese instante, el Señor Demonio Sediento de Sangre apareció frente a él, blandiendo su lanza para apuñalarlo.
Ye Chen reveló una expresión de dolor. Entonces, retiró uno de sus brazos y lanzó un puñetazo.
¡Bang! ¡Bang! ¡Bang!
La figura del Señor Demonio Sediento de Sangre desapareció y el puño de Ye Chen golpeó la nada.
