—¿Y qué? Aunque pertenezca al Palacio del Demonio Feroz, una vez que lo tome, ¡será nuestro de todas formas!
—¡El gran anciano de la Familia Baili voló desde el centro y atacó ferozmente a los dos, y luego agarró el artefacto de espacio-tiempo!
—¡Mátalo!
—¡Persíganlo!
—Los dos expertos del reino de la Creación se quedaron atónitos, pero rápidamente gritaron y lo persiguieron.
—Solo eran aliados por el bien de esta subasta, pero una vez que se trataba de luchar por tesoros, básicamente era cada quien por su lado.
—¡Gran Anciano!
—¡Ya no podemos aguantar más!
—¡Han tomado muchos de nuestros tesoros! —El Octavo Anciano de la familia Dugu gritó con dolor e indignación. Algunos otros ancianos ya habían sido asesinados por los expertos de otras facciones importantes y expertos sin afiliación, o forzados a autodestruirse. Su número disminuía rápidamente, y con ellos, sus posibilidades de recuperar sus tesoros.
—¡Gran Anciano!
