```
—Tío Li y ese guardián de la Familia Dugu, por favor firmen los contratos de vida y muerte —Ye Chen sacó dos contratos de vida y muerte y se los entregó a ambos.
—Sobre esto... —El guardián de la Familia Dugu dudaba—. Es mejor no ir tan lejos. Detengámonos aquí y concentrémonos en la ceremonia del sacrificio.
—¡Quinto Tío! ¿Crees que no puedo matar a Ye Shitian? —Los ojos de Dugu Fengchen estaban llenos de ira. Las palabras del Quinto Tío eran como un voto de desconfianza en su capacidad para matar a Ye Shitian.
¿Cómo era esto posible? ¿Realmente pensaban estas personas que él no estaba a la altura de Ye Shitian?
—Por favor, fírmalo. No quiero que nuestra lucha termine provocando a la Familia Dugu sin razón —continuó Ye Chen.
—Ehm... —El guardián de la familia Dugu aún dudaba. Dugu Fengchen era el hijo del jefe de la familia y si le pasaba algo...
—¡Dámelo! —Dugu Fengchen rápidamente arrebató el contrato de vida y muerte, lo firmó y se lo lanzó a Ye Chen.
...