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—¡Kun Wu! —exclamó.
—Ten cuidado, este chico podría estar intentando engañarnos —advirtió.
El Gran Anciano de la Secta Caldero de Píldoras miró a Ye Chen —Este chico probablemente quiere lidiar con todos nuestros discípulos de un solo golpe. ¡Tiene un gran apetito!
—¡Está mordiendo más de lo que puede masticar! —comentó alguien.
—¡No olvides que la base de su origen fue herida por un experto del reino del Caos Primordial de la Secta de la Espada de Sangre! —recordó otro.
—¿No has visto que él no usó el poder de su Gran Dao en lo absoluto? —cuestionó un tercero.
Los ojos del Gran Anciano de la Secta de la Cuchilla Salvaje brillaron mientras decía solemnemente —Ese día, él mató a Li Jiawei usando el Nirvana Dao.
—Aunque usó el poder Nirvana Dao Kun, no utilizó el Nirvana Dao. ¿Por qué alguien que depende del poder de su Gran Dao no lo usaría? ¡Es obvio que ya no puede usarlo! —concluyó.