Zayla habría preferido la terapia en casa porque dormir antes de que Robin regresara del trabajo había funcionado a la perfección y tenía la intención de mantenerlo así. Pero estaba confundida acerca de cómo Robin sabía que no estaba en el ático.
—Espera, ¿cómo supo de nuestro paradero? —preguntó al conductor y él respondió con sinceridad,
—Me llamó y me dijo que no contestabas sus llamadas.
Zayla se dio cuenta de que el conductor le había dicho a Robin adónde habían ido y comenzó a pensar en la excusa para darle. No podía cumplir con la orden de Robin de ir a su oficina. No hoy.
—Está bien, pero podemos pasar por el ático, dejé mis vitaminas —dijo, tratando de cambiar de dirección sin hacerlo obvio, pero el conductor estaba asustado por la advertencia que recibió de su jefe.