—¿Cómo puede haber tantos vehículos militares?
Luna Thomas frunció el ceño con un toque de confusión, esto definitivamente era señal de un incidente importante.
Luego pensó en los recientes refuerzos de seguridad en la villa de la Corporación Thomas por parte de la División del Dragón, y concluyó que la situación se había vuelto tensa otra vez.
Se preguntó si esto tenía algo que ver con la misión en la que Oliver Walker estaba actualmente.
Por otro lado, Emilia saltó desde una torre de vigilancia de cincuenta metros de altura, aterrizando firmemente en el suelo, y corrió hacia el lugar donde su marido solía trabajar.
—Oye...
—¡Hermana Emilia!
Esta escena tomó por sorpresa a Luna Thomas, y solo pudo apresurarse a entrar en el elevador.
Después de todo, Emilia era talentosa y estaba apoyada por los recursos de cultivo de la División del Dragón; ahora había entrado en el reino de los Maestros Marciales, por lo que su condición física también era diferente de la gente ordinaria.
