Connor iba montado en una bicicleta eléctrica y estaba a punto de apresurarse a casa. Fue en ese momento que su teléfono comenzó a sonar repentinamente.
—Connor, ¿dónde estás? ¿No sabes que tenemos clases por la tarde? —Su compañero de cuarto, Dominic, gritó con urgencia desde el otro extremo de la línea.
Dominic era el compañero de cuarto de Connor y uno de sus pocos amigos en la universidad.
—¡Oh, rayos, casi lo olvido! —exclamó Connor—. Me dirijo a la clase ahora mismo...
—¡Date prisa! —respondió Dominic en voz baja e inmediatamente colgó.
Connor montó rápidamente su bicicleta eléctrica hacia el área del campus de la Universidad de Porthampton. Su primera clase de la tarde era finanzas. Era impartida por un profesor llamado Ray Walkster. Lo que Ray más odiaba era que los estudiantes llegaran tarde. Cualquiera que tuviera el atrevimiento de llegar tarde a sus clases más de dos veces tendría que repetir la materia en el próximo semestre.
