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Zayn sintió como si su cuerpo hubiera sido golpeado por un tren. Todo su cuerpo le dolía.
Intentó levantarse, pero descubrió que no podía hacerlo en absoluto.
Connor sabía que Zayn ya no tenía la capacidad de resistir, así que lo ignoró y preguntó suavemente a Salma —¿Estás bien?
—Yo... Estoy bien… —Salma asintió apresuradamente a Connor.
—Me alegro de que estés bien. ¡Sube al coche! —Connor respondió indiferentemente antes de abrir la puerta del coche.
Salma dudó un momento antes de subir al coche.
—¡Os juro que os mataré a los dos! —pero en ese momento, el ya enfurecido Zayn de repente gritó.
Connor pensó que era imposible que Zayn se levantara, así que lo ignoró. Sin embargo, no esperaba que Zayn realmente se levantara y sacara un cuchillo de fruta de algún lugar. Empujó el cuchillo hacia la espalda de Connor.