Unos minutos después, Reena entró al salón con la recepcionista de antes.
—¡Hola, señor McDonald! —Después de ver a Connor, Reena lo saludó respetuosamente.
Cuando la recepcionista que había recibido a Connor vio esta escena, se quedó completamente atónita. La expresión en su cara era muy increíble.
Ella sabía que Connor había venido para ver a Reena y que no era una persona ordinaria. Sin embargo, nunca esperó que Connor fuera tan aterrador: no solo Reena vino en persona a recibirlo, sino que también trató a Connor con mucho respeto. Esto era algo que la recepcionista nunca había visto antes.
Reena nunca había sido tan respetuosa incluso con Thomas Morgan, así que la recepcionista comenzó a adivinar quién era Connor para tener tal influencia aterradora.
—¿No dijiste que tenías algo que decirme? ¿Qué diablos está pasando? —preguntó Connor a Reena.
—Señor McDonald, no es conveniente hablar aquí. ¡Hablemos en otro lugar! —respondió Reena.