"Lo primero que ocurrió al final de aquel día fue que, aparentemente, todo el mundo sabía lo que había pasado en el palacio, acerca de la mecha oscura y la bruja negra, quien intentaba matar al alfa de la manada del Lobo Aullante.
Por supuesto, el ciudadano estaba enfurecido. Una bruja negra dentro del rango de los usuarios reales de magia ya era un mal presagio, sin mencionar que intentó matar al alfa.
Aunque Cane no parecía tan afable como el príncipe Kellan, a ellos les gustaba bastante, ya que había ayudado con el orfanato y habían obtenido su respeto por asumir la responsabilidad y garantizar su seguridad.
El rumor que se extendió entre la gente era que el alfa asumía voluntariamente la responsabilidad de encontrar al licántropo y a la persona que había maldecido a la princesa Osana, ya que reforzó la protección alrededor de la ciudad capital.