—Así que la Familia Chu está involucrada en esto, ¿eh? Pero, ¿cómo consiguieron información sobre todos nuestros equipos de caza de monstruos? —se preguntó en voz alta Qin Mulan.
—Apostaría a que uno de nuestros propios equipos nos traicionó, proporcionándoles a la Familia Chu la información que necesitaban. Pero para que recurran a contratar a un Rey Espíritu, deben estar bastante desesperados —dijo Qin Long.
—Long'er, dejaré a este alborotador en tus manos... —le dijo Qin Mulan a su hijo.
—¡Aplastaré a este bastardo por atreverse a meterse con mi Familia Qin! —Qin Long asintió con una expresión fría en su rostro.
Mientras tanto, después de que Yuan hiciera que todos los equipos de caza de monstruos de la Familia Qin se retiraran, se dirigió a Ciudad Yun Yun, donde su equipo de caza de mazmorras se alojaba en el Hotel Ocho Puntos.
Debido a lo raras que eran típicamente las mazmorras, la mayoría de los negocios concentraban la mayoría de sus recursos en un equipo.
