Mientras Yuan absorbía cada vez más del líquido, sentía que su cultivación alcanzaba su límite máximo. Sin embargo, justo cuando parecía que iba a conseguir un avance, encontró un parón abrupto, como si algo obstruyera su progreso.
Las notificaciones continuaron apareciendo durante varios minutos hasta que se silenciaron, como si supieran que estaban haciendo algo inútil.
Sin embargo, mientras Yuan no podía superar al Rey Espíritu, dado que estaba absorbiendo continuamente el líquido del Árbol Celestial Dorado, toda la energía espiritual que absorbía tenía que ir a algún lugar.