—Comencemos la sesión —dijo Tian Kai mientras se acercaba a Tan Songyun antes de tomar asiento justo enfrente de ella.
—Tócame una canción. No importa cuál.
Tan Songyun asintió y eligió al azar una de las canciones que tocaría al público.
Tian Kai cerró sus ojos y escuchó en silencio.
Varios minutos después, ella le preguntó:
—¿Qué tal estuvo?
Tian Kai abrió sus ojos y soltó un profundo suspiro:
—Increíble. ¿Cómo lograste empeorar tus habilidades desde tu actuación hace varias semanas?
—¿P-Peor? —Tan Songyun se quedó sin palabras.
—Tócame una canción diferente —Tian Kai solicitó un momento después.
—Está bien... —Tan Songyun procedió a tocar una segunda canción. Esta vez, eligió una pieza en la que se sentía particularmente confiada.
Sin embargo, las críticas de Tian Kai solo empeoraron:
—¡Es incluso peor que tu última canción! Por todos los cielos, tus talentos están retrocediendo!
—... —Tan Songyun comenzó a preguntarse si él solo estaba jugando con ella.