Después de que terminó la competencia de cítara, Yuan y los demás regresaron al Hotel Flor Real por un momento antes de hacer el check-out del hotel y dirigirse de regreso al Templo de la Esencia del Dragón en los tesoros voladores de los ancianos de la secta.
Mientras tanto, en el mundo real, muchas personas poderosas e influyentes de más de una docena de familias diferentes de todo el mundo se reunieron en línea en una llamada grupal.
—¡Tenemos que hacer algo con respecto a este Jugador Yuan! ¡Está destrozando la reputación de las Familias Legado! Cada vez que su nombre aparece en el anuncio, ¡es una bofetada en nuestras caras! Peor aún, todavía no sabemos su identidad —dijo una de las voces con seriedad.
—¿Qué sugieres que hagamos entonces? No conocemos la identidad de este jugador, ni parece que quiera nuestro dinero —dijo otra voz.
—Ningún ser lógico se negaría a recibir estatus y dinero a menos que ya los tenga... —otra persona en la llamada grupal expresó sus opiniones.
