'Hm? Estos pasos suenan demasiado pesados para un humano'. Yuan se dio cuenta rápidamente de esto al escuchar los pasos del Señor.
Unos momentos después, los pasos se detuvieron, pero el Señor aún no se había mostrado.
—¿Te lo estás pensando? —Yuan le preguntó con una sonrisa tranquila.
—No, solo te estoy dando algo de tiempo para que te prepares. Mi apariencia... Podría sorprenderte.
Yuan rió, —¿Déjame adivinar, eres súper feo? Esto explicaría por qué estás escondido en esa cueva.
—¡Insolente! —El Gerente exclamó repentinamente.
—Solo bromeo. De todos modos, no hay necesidad de esperarme. Ya conozco tu verdadera identidad, después de todo.
—¿Ah, sí? —El Señor sonó bastante sorprendido.
—Sí. Bueno, no exactamente, pero sé que no eres humano. Eres una Bestia Divina, ¿verdad? No conozco tu especie, pero definitivamente eres una Bestia Divina.
...
Después de un momento de silencio, los pasos continuaron, y una gran figura apareció desde la cueva.