—Hola, Xiuying. Ha pasado un tiempo. —Yuan la saludó con una sonrisa.
—Estaba por la zona, así que decidí pasar a verte.
—Sin embargo, la sonrisa de Wang Xiuying se invirtió por alguna razón.
—¿Me visitas solo porque estabas cerca? A pesar de que prometiste jugar conmigo cuando ascendieras a este reino … —dijo con la cara abultada, tratando de actuar enojada pero de alguna manera terminó siendo aún más encantadora.
—Yuan, sé que has estado en este mundo durante un tiempo, ¿y solo me estás visitando ahora? También te vi en la Subasta de Escamas de Dragón de Inundación.
—Lo siento, he estado realmente ocupado con muchas cosas hasta hace poco. Honestamente, olvidé que estabas aquí hasta que escuché sobre la Academia de Sanación Espiritual. —Yuan dijo con una sonrisa de disculpa.
—¡Hmph! Te puedo perdonar, pero solo si pasas los próximos días conmigo —dijo ella.
—Claro. De todos modos, había planeado quedarme aquí el resto de la semana. —Yuan asintió de inmediato.