—¿El Señor? ¿Por qué? —Yuan levantó las cejas.
—Ahora que has derrotado al demonio más fuerte, será solo cuestión de tiempo antes de que el último demonio sea eliminado. ¿Recuerdas tu conversación con el Señor? Que te diría la verdad si te encargas de su problema de demonios?
—Sí, lo recuerdo. —Yuan asintió.
Y continuó, —Sin embargo, todavía queda un demonio. Hasta que mate al último demonio, no hablaré con él. Después de todo, fue parte del acuerdo.
—¿No quieres saber la verdad sobre Cultivo en Línea y la identidad del Señor? —El Gerente frunció el ceño hacia él.
—Claro que sí, pero no tengo prisa. ¿Por qué estás tan impaciente por decirme la verdad, sin embargo? ¿Sucedió algo? —Le sonrió.
—N-No... Olvídalo, entonces.
El Gerente se fue poco después.
Yuan regresó a su habitación poco después y practicó la técnica sin nombre.
Durante la cena, Yuan dijo:
—Meixiu, Lulu, Jinxi, mañana nos dirigiremos a la Escalera al Cielo.
—¿Hmm? ¿Ya vas a ascender? —preguntó Wang Ming.
