—¿D-De dónde vienes? Me asustaste por un segundo —Song Ling'er dijo con voz desconcertada.
Y continuó:
— ¿Qué pasó con el Templo del Dragón? Saliste antes de lo que esperaba.
—Terminé antes de lo que yo también había esperado —Yuan asintió.
—Bueno, esto me facilita mucho las cosas, de todos modos —Song Ling'er procedió a guardar el cítara en su anillo de almacenamiento.
Y continuó después:
— Debes saber por qué estoy aquí, así que no me andaré por las ramas. Estoy aquí para reclutarte en la Academia de la Melodía Celestial. Únete a mi secta.
—Lo siento, pero no puedo unirme a tu secta —Yuan rechazó inmediatamente su oferta.
No sorprendió a Song Ling'er su respuesta. De hecho, lo esperaba.
Después de tomar un profundo aliento, le preguntó:
— ¿Qué tengo que hacer para que te unas a mi secta?
—Lo siento, pero no tengo la intención de unirme a otra secta mientras esté en los Cielos Inferiores, y planeo irme de este lugar en un futuro cercano —dijo Yuan.
