—Me dijeron que si alguien podía tocar este cítara, podría quedárselo. ¿Es eso cierto? —Yuan preguntó al Senior Zou algún tiempo después.
—El Senior Zou se echó a reír a carcajadas después de ver los ojos de Yuan llenos de anticipación, y asintió—. Sí, es correcto.
—Yuan sonrió de inmediato detrás de la máscara de jade negro.
—Sin embargo, antes de podértelo dar, me gustaría conocer al menos la cara de la persona a la que le estoy dando este tesoro —dijo en voz baja el Senior Zou, pareciendo sospechar de la identidad de Yuan.
—Yuan asintió y sin dudarlo se quitó la máscara de jade negro.
—Los ojos del Senior Zou se abrieron de par en par sorprendidos después de ver el rostro joven y apuesto de Yuan.
«¡Es mucho más joven de lo que esperaba! ¡Un verdadero prodigio! ¡Es un verdadero prodigio!», grito el Senior Zou para sus adentros.
—Después de un momento de silencio, el Senior Zou asintió y dijo:
— Muy bien. La Cítara Atrapa Almas es ahora tuya, joven.