—Yuan alzó una ceja con una expresión algo sorprendida en su rostro después de presenciar la exagerada disculpa de Xiong Lu.
Sin embargo, no tenía intención de perdonar a Xiong Lu tan fácilmente y habló con voz fría —¿Por qué debería aceptar tu disculpa? ¿Crees que puedes provocarme y hacer que desaparezca con una disculpa cuando te plazca? ¿Quién te crees que eres? ¿Acaso parezco un pusilánime para ti?
—¡N-No! ¡Por supuesto que no! —dijo rápidamente Xiong Lu, pero no pudo pensar en nada más que decir en esa situación. Después de todo, era cierto que había provocado a Yuan por pura envidia, y Yuan no tenía razón para confiar en su sinceridad.
—¿Qué tengo que hacer? —preguntó Xiong Lu después de un momento de silencio.
—Nada —dijo Yuan con calma.
—¿D-Disculpa? —Xiong Lu mostró una expresión aturdida en su rostro, aparentemente incapaz de comprender el significado detrás de las palabras de Yuan.
