Sunny salió del café y tomó un tren para ir a visitar a Aiko. Después, viajó a la Academia y se despidió del Profesor Julius. El anciano estaba un poco emocionado por dejarlo ir, pero no intentó disuadir a su rebelde alumno. En cambio, trató de ofrecerle palabras de aliento.
—¡La Segunda Pesadilla! Ptui! Ningún estudiante mío puede ser asesinado por una mera Segunda Pesadilla. No te atrevas a manchar mi reputación, Sunny, muchacho... ¿me escuchas?
Finalmente, Sunny salió del Compuesto Durmiente y se quedó afuera por un tiempo, observando el sol poniéndose. Luego, giró y se adentró más en el complejo de la Academia.
La habitación donde dormía Nephis no había cambiado mucho. Cambió las flores de una de las mesas y se sentó, mirando su rostro pálido e inmóvil.
