Lluvia lo miró con una expresión seria, pensando.
Por dentro, Sunny suspiró.
Todavía no sabía cómo cambiar su mentalidad y hacerla lo suficientemente viciosa como para sobrevivir en el Reino de los Sueños. Ni siquiera sabía si quería hacerlo, y si eso era lo correcto.
Al menos parecía entender un poco más acerca de la verdad del mundo después de sobrevivir a la apertura del Portal. Por ahora, eso iba a tener que ser suficiente.
Y esta conversación fue su intento de hacer que la lección se aferrara.
Después de un rato, Lluvia dijo con incertidumbre:
—¿Sobrevivir?
Sunny levantó una ceja, mirándola con sorpresa.
¿Cuáles eran las posibilidades de que, a pesar de sus diferentes experiencias de vida, su hermana respondiera a la pregunta de la misma manera que él lo hizo, hace tanto tiempo, en el infierno desolado de la Costa Olvidada?
Permaneció en silencio por un tiempo, recordando esos días terribles y maravillosos. Luego, negó con la cabeza.