—¿Qué dijiste...? —Rubí habló con incredulidad, realmente no creía lo que había escuchado.
Hoy fue un día normal para Rubí. Llegó a su oficina y comenzó a hacer sus cosas habituales.
Investigar a ciertas personas, chantajear a algunos políticos que podrían saber información sobre ciertos 'dioses', o políticos que sabían información sobre lo que estaba pasando en Nightingale.
Por supuesto, no se olvidó de dedicarse a su investigación tampoco, ¿y qué investigación era esa?
Cazadores y sus medios de convertir a los humanos en híbridos de vampiros.
Un día normal como cualquier otro, hasta que recibió una llamada de Esther.
—Dije que tu esposo llamó perra a la diosa de la belleza.
—... —Un momento de silencio cayó sobre el lugar.
Pronto, Rubí toma una respiración profunda.
Suspiro…
'Él realmente lo hizo…'
—Y…? ¿Cuál fue su reacción? —No tiene sentido llorar sobre la leche derramada, así que decidió de inmediato averiguar cuál fue la reacción de la diosa.