Ha pasado una semana desde ese incidente.
En un hotel en las afueras de California, se podía ver la silueta de un hombre con ojos rojos sangre mirando la televisión.
—Este es el peor resultado posible. El hombre habló con un tono lleno de molestia.
—¿Todavía lo están transmitiendo, huh? —Se escuchó la voz neutral de una mujer.
El hombre miró a la mujer que acababa de entrar en la habitación y dijo:
—Sí, he intentado usar la influencia de la iglesia para que dejen de hacerlo, pero no parecen escucharme. —El hombre estaba muy molesto.
—Entonces, como pensábamos, ¿esto es obra de vampiros? —La mujer habló mientras miraba la televisión.
—¿En serio? Solo los vampiros y las brujas tienen suficiente influencia en la sociedad para hacer un movimiento así. Y las brujas no harían algo así, después de todo, quieren mantener su neutralidad en todo.
De repente, la voz de la mujer que presentaba las noticias fue escuchada por los dos seres:
