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Capítulo 973: Jugar con dioses.
—¡Salud! —Violeta, Haruna, Amaterasu y Hela hablaron al mismo tiempo mientras chocaban sus copas.
—Fufufufu, nunca esperé que sería tan fácil engañar a los dioses. Es una experiencia bastante emocionante —comentó Violeta después de dar un sorbo de vino.
—En defensa de los dioses, el plan estaba tan bien oculto que pocos podrían haberlo notado —habló Amaterasu mientras se sentaba.
En este momento estaban en una habitación en el Castillo personal de Víctor, ubicado en el antiguo Panteón Egipcio. Ahora renombrado por Víctor como Elvenorah, la Utopía Eterna.
—¿Cómo van a saber que han sido engañados si ni siquiera se les ha dado una pista? —Haruna habló sonriendo como un zorro, de vuelta a su apariencia de Zorro de diez colas.
