—¿Qué es esto? ¿Qué es? —Me pregunté mientras miraba la columna de llamas saliendo del cuerpo de ese recién nacido.
—Esto debería haber sido un trabajo fácil, elimino al arrogante recién nacido y me llevo a la mujer que tanto deseo, ¡pero qué es esto!?
—¿No era solo otro recién nacido que tuvo la suerte de llamar la atención de Violeta? —Entiendo a Violeta, debe haberse aburrido y encontrado un humano para tratar como su juguete; esto pasó muchas veces en el pasado y las vampiresas siempre lo han hecho. ¿No era solo eso!? ¿No era solo un juguete!?
—Pero... ¿Por qué tiene este poder!? ¿POR QUÉ TIENE ESTAS LLAMAS!?
—¿Cómo puede un recién nacido tener el poder del Clan de la Nieve!? ¿Quién es este hombre!?
De repente, Corneliu escuchó el rugido de una bestia.
—ROOOOOOOOOOOOOAR!
«¡Hiii~!» —Corneliu cayó al suelo mientras miraba a Víctor con miedo.
La apariencia de Víctor había cambiado, sus ropas habían desaparecido debido al calor y estaba prácticamente desnudo, pero eso no se notaba debido a las llamas que cubrían su cuerpo.
El cuerpo de Víctor estaba cubierto de fuego, sus orejas se volvieron más afiladas como las de un elfo, la esclerótica de sus ojos, que antes era blanca, cambió a un negro oscuro, su iris se volvió de un rojo sangre, y la pupila de sus ojos se parecía a la pupila de un dragón.
Su sonrisa creció anormalmente, y Corneliu pudo ver todos los afilados dientes de Víctor; pudo ver que los dientes de Víctor también habían sufrido un cambio. Los viejos dientes de Víctor, que parecían pequeños dientes afilados, crecieron y parecían haber cambiado a los dientes de una bestia demoníaca.
—¿C-Cómo... Cómo tienes ese poder!? ¡Solo los condes vampiros tienen ese poder!? ¡¿Quién eres tú?!
...
Hace calor, hace calor, pero me siento bien... Me siento liberado, ¡pero siento ira! Una furia creciente se estaba construyendo dentro de mi cuerpo y no podía controlar esa furia.
Todos mis sentidos mejoraron, podía ver, sentir y escuchar todo a mi alrededor; era una sensación incómoda.
Miro al vampiro rubio. Cuando me mira, veo que comenzó a orinarse de miedo y, cuando vi eso, mi sonrisa sádica creció en mi rostro. Quería humillarlo. Quería verlo en más desesperación. ¡Quería escuchar sus gritos!
Di un paso adelante y noté que, cuando lo hice, el suelo sobre el que pisé empezó a prenderse fuego y también noté que en el momento en que di un paso adelante, todo el cuerpo del vampiro tembló de miedo.
Con un pequeño impulso de mis piernas, aparecí frente al vampiro rubio y lo agarré por el cuello.
—¡AHHHHHHH! —Comenzó a gritar de dolor, ¡y escuchar esos gritos me llenó de satisfacción sádica!
Me di cuenta de que mi mano le dolió mucho, apreté su cuello más y vi su cuello arder con fuego.
—¡Suéltame! ¡S-suéltame!
Hice lo que quería, lo solté —gentilmente, por supuesto—, probablemente no le gustó mucho mi lado gentil. Sostenía su garganta en mi mano y tiré
—¡AHHHHHHHHH! —Esos fueron sus últimos gritos y, en poco tiempo, ya no pudo hablar más.
Cuando vi a ese noble vampiro arrodillado con la garganta destrozada, cuando lo vi mirar con miedo; sentí que todo mi cuerpo temblaba de placer. Quería más. Quería verlo en desesperación. ¡Quería verlo humillado!
Di un paso hacia el noble vampiro para seguir jugando con mi nuevo juguete.
De repente, huelo un intenso olor a sangre y giro mi rostro hacia el aroma; conocía ese olor, no recuerdo dónde, pero sí lo hacía.
Pronto sentí un dolor intenso en mi pecho. —Ugh —Fue como si alguien estuviera apretando lentamente mi corazón—; me dolía mucho el corazón, sabía que algo estaba mal.
Utilizo mi visión vampírica y, en poco tiempo, mi visión se convierte en un mundo de sangre; ignoro a todos los humanos en mi campo de visión y enfoco todos mis sentidos en el olor a sangre.
Pronto veo la visión de varios humanos cubiertos de energía dorada rodeando a dos vampiresas. Una vampiresa estaba tirada en el suelo y parecía herida, y la otra vampiresa estaba arrodillada mientras sostenía sus brazos...
Luego enfoco mi atención en la marca de mordida de la vampiresa que estaba arrodillada.
Sentí que mi corazón palpitaba como si la estuviera llamando, entonces entendí algo:
—Ruby.
Enfoqué toda mi fuerza en mis piernas y salté hacia las dos vampiros.
Al ver a Víctor marcharse, Corneliu no entendió qué había pasado.
...
En una zona que debería haber estado llena de civiles caminando.
Un grupo de cazadores estaba rodeando a dos vampiresas, la primera mujer llevaba un vestido de sirvienta; tenía el cabello blanco y los ojos rosados, y sostenía la herida en su estómago. —Dama Ruby, por favor, huya —dijo mientras tosía sangre en el suelo.
La otra mujer tenía el cabello rojo y los ojos verdes, sostenía su brazo que estaba herido por un corte profundo. Al escuchar lo que dijo la sirvienta, miró a Luna con una mirada neutral, aunque cualquiera que conociera bien a Ruby podría decir que estaba preocupada por Luna, —Silencio, sirvienta —ordenó.
Luna mostró una pequeña sonrisa gentil y calló, pero por dentro, estaba intentando planificar algo para que Ruby pudiera escapar, pero, como de costumbre, no se le ocurría nada.
Escupe sangre en el suelo y mira a la mujer que la atacó: llevaba una chaqueta profesional blanca y parecía una mujer japonesa, piel blanca, ojos negros de ónix; también parecía alta para ser japonesa, con una altura de 175 cm. Luego escuchó a la mujer japonesa decir:
—Ruby Scarlett, heredera del Clan Scarlett, eres muy valiente para pasear sin un guardia.
—No necesito guardaespaldas —respondió Ruby secamente—, todos los seres de nuestro mundo conocen las consecuencias de provocar la ira de mi madre. —Toca su herida con los dedos, luego los lleva a su frente; cuando ve la sangre en su dedo, piensa:
«¿Cuántos años han pasado desde que me lastimaron? Recuerdo que la última vez que ocurrió fue cuando tenía 3 años, recuerdo que ese día un país desapareció de la faz de la Tierra».
Cuando los cazadores mayores escucharon las palabras de Ruby, temblaron un poco de miedo, pero cuando miraron a la mujer japonesa, se sintieron más aliviados porque vieron que la mujer no tenía miedo.
—De hecho, —la mujer habló de acuerdo con las palabras de Ruby.
—Todos los seres de nuestro mundo conocen las leyendas de Lady Scathach Scarlett… —notó que sus subordinados temblaban de miedo cuando escucharon el nombre de la mujer y sacudió la cabeza, decepcionada por dentro, luego continuó:
—La vampiresa más fuerte del mundo. Una vampiresa de más de dos mil años, ha estado caminando por la Tierra desde que Jesús nació en este mundo. Loca, psicópata y considerada por la iglesia como un monstruo que nunca deberíamos provocar. Porque, en el momento en que se provoca, puede ocurrir un incidente como el de hace 18 años; un incidente que recordó al mundo lo aterradoras que pueden ser las criaturas vampiros.
En el momento en que se mencionó ese incidente, todos los cazadores miraron a Ruby como si hubieran tomado la peor decisión de sus vidas, el único que no se sintió así fue Carlos, el cazador que atacó y mató a la sirvienta de Sasha.
Miró a Ruby con ira visible en sus ojos, —Debido a ti, un país entero desapareció de la faz de la Tierra.
Ruby miró al hombre con ojos neutros, —¿Y qué?
—¿Eh? —el hombre no podía creer lo que oía.
—No me tires tus hipocresías. ¿Cuánta gente ha matado la iglesia en nombre de su 'dios'? ¿Cuántas guerras ha causado la iglesia a causa de su 'dios'? ¿Debería recordar el incidente de la santa de Orleans Juana de Arco?
—¡Eran pecadores!
—Oh? ¿Así que está bien matar a miles de personas solo porque dijiste que eran 'pecadores'? Como era de esperar, la hipocresía de la iglesia no tiene límites. —Ruby bufó con desdén.
—¡No finjas que te importa! ¡Eres solo un monstruo que chupa sangre y mata por diversión! —gritó Carlos enojado.
Los compañeros de Carlos simplemente lo miraron sorprendidos, estaban desconcertados por la actitud de Carlos, normalmente no era un hombre que se irritaba fácilmente.
La mujer japonesa miró a Carlos; el secuestro de su compañera lo afectó tanto, ¿eh?
Ruby soltó una risita suave de diversión.
—¿De qué te ríes?
Ruby no respondió, simplemente miró a Carlos y todos pudieron ver que sus ojos se habían vuelto rojo sangre:
—Nunca he matado un alma humana en mi vida. Siempre he bebido sangre donada por humanos a hospitales, usé el dinero de mi madre para comprarla para mí.
...
Carlos abrió la boca en shock, miró a la mujer japonesa, cuando vio a la mujer japonesa moviéndose suavemente, no creyó lo que estaba haciendo. '¿Ataqué a alguien inocente? ¡Incorrecto! ¡Ella no es inocente, es una vampiresa! ¡Una vampiresa no es inocente!'
La sonrisa de Ruby creció de manera antinatural a medida que comenzaron a aparecer sus afilados dientes:
—La dura verdad para tragar es; ustedes cazadores solo me cazan porque soy una vampira, soy una especie diferente. Para nosotros los vampiros, todos los humanos son solo ganado, y para los humanos, los vampiros son sus depredadores naturales, eso es todo.
—Esa es la ley de la naturaleza, necesitamos sangre y, debido a eso, algunas de mi especie cazan activamente a los humanos. Y, para defenderse de este depredador natural, ustedes fueron creados. Esta situación fue creada por decisiones tomadas en el pasado, y este es simplemente el curso natural de las cosas... Aunque hemos creado el ritual para controlar nuestra sed de sangre, para la iglesia no importa, solo buscan eliminarnos —bufó con desdén—. Dios, motivaciones, explicaciones e incluso por qué me atacas hoy son solo excusas para esta verdad inmutable. Somos los depredadores y ustedes son la presa, pero... Lamentablemente, con el tiempo, la situación se ha equilibrado y se ha convertido en el concurso de dos depredadores. Uno que solo terminará cuando los vampiros o los humanos desaparezcan de la faz de la Tierra.
—Y te puedo garantizar que nosotros seremos los ganadores —Ruby terminó de hablar con una gran sonrisa en su rostro que mostraba todos sus afilados dientes.
...
Todos los cazadores miraban a Ruby en shock, cuando la mujer japonesa vio esto, dijo:
—Como era de esperar, también heredaste la locura de tu madre, no creo que debamos dejarte vivir.
—¿Loca? ¿Yo? Pffff... Hahahahahaha —rió Ruby suavemente.
La mujer japonesa simplemente levantó una ceja en duda.
Ruby dejó de reír y habló con una gran sonrisa en su rostro:
—Mizuki... Soy la vampiresa más cuerda que jamás conocerás.
—¿Estas son tus últimas palabras? —preguntó la mujer japonesa.
Ruby no responde, simplemente gira su rostro y mira hacia un lado y muestra una expresión de asombro, pero pronto aparece una pequeña sonrisa en su rostro. Gira y mira a la mujer japonesa, —Ustedes están, jodidos.
—...Huh? —La mujer no entendió, pero cuando sintió que algo se acercaba a gran velocidad y cuando escuchó el ruido de los edificios siendo destruidos, sus instintos gritaron:
—¡Retrocedan ahora! —ordenó.
Y como cazadores experimentados, rápidamente escucharon las órdenes de la mujer, ni siquiera se atrevieron a cuestionar.
Pronto un ser cubierto de fuego cae del cielo frente a Ruby.
...
Editado por: IsUnavailable
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