En la sala de té, Candice y Finn estaban sentados juntos.
Mientras más hablaba Finn, menos seguro de sí mismo se volvía. Él dijo:
—Puede que no sea lo suficientemente bueno para Monica.
—No es que no seas lo suficientemente bueno para ella. Es solo que lo estás expresando incorrectamente —dijo Candice—. Cuando ustedes terminaron, estabas tan decidido a rechazar a Monica. Luego, Monica casi murió porque te salvó la vida, así que elegiste volver con ella. Después de que volvieron pero no le demostraste tu amor, ella pensó que solo regresaste con ella porque sentías lástima por ella. Si yo fuera Monica, también lo pensaría así.
Finn asintió.
De hecho, cuando Monica estaba realmente decidida a terminar con él, él ya sabía que esa era la razón. Por eso quería compensar eso, pero no importaba lo que hiciera, Monica parecía no creerle.
—¿Qué hizo Monica para conquistarte en ese momento? —preguntó Candice.
Finn se quedó atónito. —Ella no dejaba de insistir.
