—Pero aún así logré someterlo —. Zoe estaba un poco orgullosa.
—¿Cuándo planeas casarte con Nox?
—En otro año y medio —Zoe dijo—. He sometido a Nox, ¡pero él no me ha sometido a mí aún!
—¿No tienes miedo de fallar?
—Si estás tan preocupado por mí, ¿por qué me invitaste a salir?
—También soy una persona de buen carácter y nunca he hecho las cosas difíciles para una mujer. Si realmente te juntas con Nox, soportaré el dolor y renunciaré a ti —. Mientras hablaba el hombre, acercó su cara a la boca de Zoe y la besó una y otra vez.
Shelly apartó la mirada. Sin embargo, todavía podía escuchar su conversación.
—Puede que lo digas, pero tu cuerpo no es tan honesto como tú —dijo Zoe.
—Todavía no estás casada, ¿verdad? Antes de casarte, tienes que disfrutar de lo mejor del mundo...
Así nomás, los dos comenzaron a besarse en la mesa de comedor.
Shelly se preguntó si Nox alguna vez había pensado que caería en una zanja algún día.
