"Sentía que Finn había sido un poco demasiado frío con su hija y temía que ella saliera lastimada.
—Olvídalo —dijo. Parecía que Gary no quería profundizar en este tema—. No menciones esto frente a Mónica. Si ella no ha dicho nada, no necesitamos hurgar en la herida de nuestra hija.
—Lo sé —Rubí asintió.
—Duerme un poco. Has pasado por mucho hoy. Tómate un descanso para recuperarte —Gary la consoló.
Rubí asintió. Se apoyó en el brazo de su esposo y cerró los ojos. Luego, poco a poco, se podía oír el sonido de su respiración uniforme.
Una vez segura de que habían caído dormidos, Mónica abrió los ojos y vio a sus padres abrazándose. Pensó en las muchas vidas de cultivo que se necesitarían para obtener un amor tan hermoso como el de sus padres, que había durado por décadas.