Respiró profundo y atendió la llamada. —Líder.
—¿Cómo va lo de Farmacéuticas Cardellini? —preguntó de inmediato la otra parte.
—Estará listo en unos días
—De acuerdo —respondió Warren—, ¿sabes acerca de Eden?
—Lo sé —Michael no ocultó nada.
—Escuché que tienes una buena relación con él?
—Somos compañeros de clase, así que somos grandes amigos. También es el joven maestro mayor de los Cisnes. Creo que es útil, así que he mantenido contacto con él —dijo Michael.
—Se escapó justo frente a nuestras narices —dijo Warren sin rodeos.
—Lo escuché —dijo Michael—, traté de contactar a Eden, pero no pude.
—Michael —el tono de Warren era severo.
—Sí —respondió Michael respetuosamente.
—Será mejor que no me entere de nada —Warren se hizo entender.
La mano de Michael se apretó en el teléfono.
Resultó que los Sanders habían empezado a sospechar de él.
De hecho, también lo había esperado.