El coche negro entró directamente en la residencia de los Sanders, donde vivía el líder de Harken.
Estaba ubicado en el centro del área más meridional de la Ciudad de South Hampton, separado de los edificios más altos de la Ciudad de South Hampton por un foso.
La residencia de los Sanders estaba situada en el sur y daba al norte. Delante de ella había una puerta solemne y poderosa, donde cuatro Guardias Nacionales vigilaban. Cuando el coche pasó por la puerta y cruzó un gran patio, también había varios guardias vigilando a distancia en el patio. La sensación general era demasiado solemne y opresiva.
El coche se detuvo en el patio más interior.
La entrada al patio estaba custodiada por ocho guardias.
En ese momento, un guardia se adelantó y abrió respetuosamente la puerta del coche para Jeanne.
Cuando Jeanne salió del coche, los guardias que estaban allí saludaron al unísono, mostrándole gran respeto.
Jeanne apretó los labios.
