septiembre 2017
—Mamá, ¿tenemos que ir a la escuela? Quiero quedarme contigo —dijo Violet con un puchero trágico en su cara.
Era su primer día de preescolar y el día en que Keeley finalmente iría a trabajar en un laboratorio de investigación privado llamado Departamento de Avance Médico, o DOMA por sus siglas. Aaron pudo ingresarla ofreciendo una donación muy grande con la condición de que ella pudiera utilizar las instalaciones para continuar su investigación sobre la fibrosis quística.
Realmente esperaba que nadie más que el director supiera cómo entró, porque no quería que la miraran raro. Sería muy incómodo ser conocida como la mujer que solo trabajaba allí porque tenía un esposo rico.
—Mamá tiene que ir a trabajar, Vi. ¿Recuerdas que hablamos de esto? Te vas a quedar aquí y jugar con Kaleb y conocer a nuevos amigos por un tiempo. Vendré a recogerte a las tres y luego tú me puedes contar todo lo que hiciste y podemos hornear galletas, ¿de acuerdo?