Para romper la tensión que sentía que se apoderaba de la habitación, Keeley se dirigió a su papá. —¿Puedes tomarme una foto junto al árbol? —preguntó.
—Claro. ¿Quieres sacar la punta de árbol de repuesto y usarla como sombrero?
—¡Oh, eso sería genial! ¡Vuelvo enseguida! —Keeley se disparó a buscarlo y abandonó la habitación. Estaba en una caja con cosas extras de Navidad en la antigua habitación de Kaleb y no fue muy difícil de encontrar.
Parada junto al árbol, posó antes de colocárselo en la cabeza y se mantuvo muy quieta para que no se cayera. Su padre tomó la foto y proclamó que ella hacía un buen árbol de Navidad antes de devolverle su teléfono.
Se quitó la estrella de la cabeza. —Probablemente deberíamos cambiarnos a nuestros pijamas ahora. Aaron, puedes esperar aquí fuera. —declaró.
Keeley se dirigió a su habitación y se puso el pijama de reno. Cuando salió, su papá estaba usando el suyo, pero Aaron no estaba por ningún lado. ¿Estaría en el baño?