El tenue resplandor de la pantalla del portátil iluminaba el rostro de Cassidy, proyectando largas sombras por su habitación. Una sonrisa se dibujaba en sus labios mientras veía un video familiar —la entrevista de los hermanos Jonas como la mayoría de los blogs la habían nombrado.
Lo había visto más de cien veces desde la entrevista, pero cada vez tenía el mismo poder para cautivarlo. Ella lucía radiante, sus ojos brillaban con una excitación nerviosa mientras hablaba.
Se encontró cautivado, no solo por su belleza, sino por sus expresiones animadas y el timbre de su voz. Le encantaba cómo su voz bajaba y subía con la emoción mientras hablaba de su nueva familia, todo eso lo llenaba de un calor que le sorprendía.
Estaba tan contento de que Aarón Jonas la había aceptado como propia y la había hecho parte de su familia. Estaba contento de que las cosas le fueran bien a Andy.