Tom miró a Jamal con falsa molestia mientras Lucy estaba acostada en la cama a su lado, leyendo un cuento para dormir mientras Jamal se reía cada vez que Lucy cambiaba su voz para adaptarse al personaje del que estaba leyendo.
Tom suspiró cuando Lucy terminó la segunda historia y Jamal seguía despierto, —¿No deberías estar durmiendo ya, joven? —Tom preguntó, y Jamal negó con la cabeza.
—No. Me encanta escuchar la voz de Lucy —dijo Jamal, y Tom frunció el ceño ante él.
—¡Ay! —exclamó Lucy con una risita mientras se inclinaba hacia adelante para besar su frente y mejillas.
—Pareces que te gusta todo de ella. ¿Hay algo que no te guste de ella? —Tom preguntó, y Jamal asintió con la cabeza, sorprendiendo tanto a Tom como a Lucy.
—¿Y eso qué sería? —Lucy preguntó con curiosidad, y Jamal señaló a Tom.
—Tu novio. No me gusta que tengas novio —dijo Jamal con una sonrisa, y Lucy estalló en una carcajada, mientras Tom soltaba una risa ante el sentido del humor de Jamal.