—¿Ustedes pelearon? —preguntó Gina cuando Heaven regresó a su habitación.
—Está enojado conmigo. Pensé que se le pasaría, pero sigue amargado. Ni siquiera me da la oportunidad de explicar —se quejó Heaven.
—¿Por qué pelearon?
Heaven estaba a punto de responder cuando se dio cuenta de que no le había contado a su amiga nada sobre lo que estaba pasando entre ella y Zamiel. Había tenido miedo de que todos la juzgaran por estar con el hombre que la secuestró y lastimó a su familia y amigos.
Él incluso lastimó a Gina. ¿Cómo se suponía que debía decírselo?
—Oh, tienes esa mirada otra vez —dijo Gina.
—¿Qué mirada? —preguntó Heaven.
—La mirada cuando estás escondiendo algo. Vamos. Sabes que puedes contarme cualquier cosa. No soy mi hermano —Ella sonrió.
—Puede que no me quieras después de que te lo cuente.
—Nada en el mundo puede hacer que te deje de querer —aseguró Gina.