Jessica no había sido atada, ni había alguien vigilándola. En cambio, estaba en la pequeña cabina de la nave espacial junto con Magnus. Hubo momentos durante el vuelo en los que imaginó clavándole su daga en el cuello, después de todo, estaba justo detrás de él.
Todas las ideas de eso salieron de su cabeza, sin embargo, porque si Magnus estaba tan seguro de darle la espalda, tenía que haber una razón. En este momento, ella se preguntaba más si Andy estaba bien.
—Tanto Edvard como Hikel aparecieron, gracias a ellos todo se solucionó. Pudieron salvar a Galanar, así que también deberían poder salvar a Andy. Ahora, necesito apegarme al plan. —Jessica levantó la mano y sintió el pequeño bulto detrás de su oreja.
Era el dispositivo de rastreo que Logan había instalado.
—Todo está bien, él no ha descubierto esto, cuando lleguemos a donde necesitamos estar, estaré a salvo. —pensó para sí.