Stark se había quedado demasiado tiempo junto al muro, había estado moviéndose lentamente con el resto de ellos para ver si había algo más que pudiera escuchar o averiguar, ya que la información que había recibido hasta ahora no estaba mal.
Al mismo tiempo no quería alejarse demasiado de Sil.
—¿Podrías imaginar que, justo en el momento en que decido salir, ese tipo finalmente despierta y estoy seguro de que si lo hiciera, estaría muy confundido? —Stark pensó.
Al dar la vuelta, miró su camino, solo necesitaba correr por un callejón, girar a la derecha de un solo golpe y estaría bien. Eso fue hasta que una sombra se cernió sobre él desde arriba.
—¿Qué es esto, pensé que podía oler algo fresco. —Dijo el Dalki—. Parece que uno de ellos sigue vivo en este planeta después de todo. Esto hará nuestro trabajo mucho más fácil.
