El planeta de los Namrik había sido conquistado con éxito y fue principalmente debido a las acciones de los vampiros.
Por un segundo, cuando los Namrik presenciaron luchas internas, pensaron que tenían una oportunidad. Todos estaban pegados a los esfuerzos del vampiro mientras derribaba a los suyos, uno por uno, y desataba un poder que podía sentirse en todo el planeta.
Y sin embargo, al final no significó nada. A los Namrik se les permitió seguir operando como venían haciéndolo, pero ahora había una base en el planeta donde estaría un ejército simbólico.
La mayor parte de su tecnología, así como sus minerales y cristales de bestias que habían recolectado, serían entregados. Para los Namrik, se sentían como esclavos.
