Por alguna razón, el pasado había resurgido en la mente de Zero. Quizás fue porque estaba cerca de lograr su objetivo, quizás fue porque podía ver esa temida arma en el suelo.
La que casi le había arrebatado la vida, de cualquier manera esos días pronto quedarían atrás, ya que tenía una última cosa que hacer. No había más peticiones, esto era todo.
Al simular que balanceaba la espada hacia Peter, Zero luego la balanceó detrás de él, apuntando directamente al cuello de Erin. Él sabía de su habilidad, porque sabía mucho sobre Leo también. Ella era capaz de percibir cualquier tipo de fluctuación de energía, lo que le permitía predecir cuándo un ataque llegaría antes de que lo hiciera.
Por eso, con este golpe, lo único que Zero usó fue el primer escenario de Qi para mejorar la fuerza de sus músculos y solo eso. Condensó su Qi, concentrándose en no hacerlo mover ni un poco, y balanceó la espada.