El barco de tamaño mediano estaba en camino a su destino, era un lugar que los vampiros acababan de abandonar y ahora estaban regresando de nuevo. A bordo del barco de tamaño mediano, Quinn intentaba tener una idea de cómo eran sus fuerzas actuales.
Había los cuatro que lo habían saludado, luego un total de diez vampiros más a bordo, parecía. El barco parecía que podía albergar a unas 100 personas más o menos, y era demasiado grande para ellos.
Sin embargo, Quinn nunca esperó un gran equipo de expedición en primer lugar, especialmente porque solo se había seleccionado a un líder de familia y la mayoría de ellos estaban en las líneas del frente luchando. En ese momento, Quinn estaba en una reunión con los dos vizcondes y el conde, aunque tenían un invitado más inesperado, que era Jesk, quien se había negado a dejar de seguir a Quinn.
Honestamente, Quinn se sentía seguro con él a su lado, su lealtad parecía inquebrantable y quizás era más confiable que los humanos y vampiros.
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