—¿Cómo te fue? —Lith también estaba jadeando y su maná violeta funcionaba con las reservas vacías.
—¡Fue genial! —Solus le aplaudió telepáticamente— Realmente eres un maestro forjador talentoso. Por mi Mamá, ojalá también tuviera un núcleo violeta. A mi nivel actual, me falta el poder bruto que requiere la buena Magia de Creación.
—Incluso usando Dominación para simplificar las cosas solo puedo llegar hasta cierto punto.—
—Espera, ¿lograste combinar la Dominación con la Magia de Creación? —Lith soltó sorprendido, recibiendo un asentimiento en respuesta— Además, ¿me estás diciendo que acabo de tener éxito?—
—Define tener éxito.—
Un ruido de quebrarse le hizo volver la vista hacia la daga cuando apareció la primera fisura en su superficie. La Davross chilló como una bestia agonizante mientras la presión interna debido al metal comprimido y los encantamientos deficientes se acumulaba.
—¿Eso fue sarcasmo? ¿Cómo llamas a esto talento?—
