—¿Lucha? —Lith resopló—. Estaba guardando mis fuerzas y haciendo algunos experimentos. Encontrar un monstruo revertido es una oportunidad rara. Solo quería ver de lo que eran capaces.
Lith había aprendido lo suficiente sobre la magia como para saber que mientras entendiera los principios subyacentes de las llamadas "habilidades innatas", podría encontrar una forma de replicarlas y agregarlas a su arsenal.
—¿Experimentos? —Ratpack hizo eco, tragando un bulto de saliva—. La palabra le trajo a la memoria innumerables experiencias desagradables.
—Maestro y tú hechura de un mismo saco.
—Todavía no has respondido a mi pregunta final. —Lith presionó la punta del Guardián contra la garganta de Ratpack—.
—¿Por qué debería liberar a tu maestro? ¿De qué me sirve a mí?
—Quizás puedas matar a todos. —Ratpack se lamió los labios de nuevo—.