En su forma completa, la criatura habría tenido más de cuatro metros (13'2") de altura, pero se vio obligada a mantener sus proporciones humanas para no golpear las paredes y el techo con cada uno de sus movimientos.
—Puedes ser más pesado, pero apuesto a que no estás entrenado para volar en un espacio pequeño como este, mientras que yo sí. Somos cuatro y tú estás solo. No seas tonto— Ienta voló alrededor de Tiamat con un patrón irregular.
Ella hizo que las largas cuchillas de adamantita que cubrían sus garras tintinearan rítmicamente para llamar la atención de Lith mientras Dhenma abría un Paso de Distorsión.
Lith observó su preparación con una mirada divertida en sus siete ojos.
—¿Solo? —Rió entre dientes, su voz aumentaba lentamente en intensidad hasta convertirse en una explosión de risa maniática— ¡Nunca estoy solo!
