—Pido disculpas profundamente por el comportamiento del Sargento Throq.— Eman inconscientemente dio un paso atrás antes de hacer una reverencia profunda a Lith. —Actuó por su cuenta sin mi permiso.—
—¡Maldito idiota!— Realmente pensó. —Su truco nos costó uno de nuestros mejores equipos, un buen soldado, y destruyó lo poco que quedaba de nuestro ánimo. Incluso yo no puedo dejar de mirar el desastre sangriento de lo que queda de él.
—Si el Explorador Quaron nos abandona, estamos perdidos.—
—Te estoy dando el beneficio de la duda y dejaré pasar esto.— Dijo Lith. —Sin embargo, si alguno de tus hombres intenta algo gracioso de nuevo, te haré responsable y comenzaré el ataque de inmediato. Te quedan dos días y-veintitrés horas.—
Se fue antes de que el Comandante pudiera responder, recogiendo el cadáver con una construcción de luz sólida en forma de mano.
—Informe de estado.— Lith preguntó a Estar mientras metía el precioso equipo dentro de su dimensión de bolsillo.
