—¿Lo entiendes ahora? —Dijo Faluel—. Tener un cuerpo más grande hace que cuando me convierto en una figura más pequeña, pueda retener la mayoría de mis habilidades. Solo necesito afectar suficiente fuerza vital para dar forma a mi nueva forma mientras que el resto permanece igual.
—Ahora para mi siguiente truco... —Faluel comenzó a cambiar nuevamente, asumiendo lo que podría considerarse un híbrido de Dragón-Hidra.
Su cuerpo no era humanoide sino cubierto de gruesas escamas esmeraldas, aproximadamente 3.5 metros (11'6") de altura. Tenía siete cabezas de serpiente, cada una en un cuello serpentino más de cuatro veces más largo que el de un humano, lo que les permitía mirar en todas direcciones.
Ambas manos y pies terminaban en garras afiladas como cuchillas y había un conjunto de alas membranosas en su espalda. Su fuerza vital volvió a parecerse a una estrella violeta, pero ya no era una esfera perfecta.