Tres días después, Timothy Woods entró en la oficina de Wendy de muy buen humor.
—El acuerdo de accionistas está listo y también he informado a nuestro abogado —dijo Timothy—. Si no tienes algo urgente entre manos, podemos firmar los documentos ahora mismo.
Sólo después de terminar fue que Timothy notó a Todd sentado en el sofá.
Una luz parpadeó cruzó los ojos de Timothy al ver a Todd.
Todd nunca había estado de acuerdo con que Wendy obtuviera ninguna de las acciones de HG.
—¿Todavía no has ido a Lewis Design? —preguntó Timothy—. Miró la hora. Pasaban de las diez.
Por derecho, Todd debería haberse ido a Lewis Design después de dejar a Wendy en HG.
Parecía que Todd esperaba en HG a propósito.
Wendy también miró a Todd, pero no dijo nada.
Porque ella adivinó que Todd tenía algo que decirle.
Después de todo, se había autoinvitado a tomar un café en su oficina después de llevarla a trabajar ese día.
—Corrine, escúchame esta vez —dijo Todd, tal como Wendy esperaba—.