—Michael Lucas ha estado trabajando horas extras y llega tarde a casa por la noche. Habíamos planeado que se lo tomara con calma hoy —explicó Wendy en nombre de Michael.
—Después de trabajar tanto, ¿no te cansaría aún más ir de compras al centro comercial? —preguntó Winnie sarcásticamente.
Wendy se sentía perdida al interactuar con su suegra.
—Bueno, ahora, no seas una madre celosa. Es una bendición que tu hijo esté en un matrimonio tan amoroso —bromeó la señora al lado de Winnie—. Preferiría que mi hijo pasara tiempo con su esposa. ¡Todo lo que hace es pasar tiempo fuera! ¡Me frustra tanto!
—Bueno, tú elegiste a tu nuera. Claro que te gusta. Así que, esperar que tu hijo y tu nuera tengan un buen matrimonio es natural. En cuanto a mí... —Winnie no pudo terminar su declaración antes de notar un codazo de su amiga.
Ahora notó la expresión en el rostro de Michael y tragó sus palabras.
Debería haberse contenido.
